Brutal agresión familiar en Concepción deja un herido y un menor detenido

Una disputa familiar culminó en una agresión violenta en plena vía pública el miércoles por la tarde en Concepción, región del Biobío. Como resultado, una persona resultó herida por un disparo y un menor de 14 años fue arrestado.

El mayor Milton Rossel, de la segunda comisaría de Concepción, informó que el incidente ocurrió en la intersección de las calles Lientur y Avenida Los Carrera, justo después de que la víctima llegara en su vehículo a recoger a sus hijas del jardín infantil.

Según Rossel, el hombre fue interceptado por un camión, de cuyo interior descendieron varios individuos que lo atacaron. Uno de los agresores portaba un cuchillo, mientras que otro utilizó un arma de fuego, causando lesiones graves a la víctima.

Durante el ataque, los agresores también sustrajeron a las hijas del hombre del interior del vehículo, llevándolas consigo. Se confirmó que ambas niñas fueron posteriormente entregadas a su madre, mientras que los demás ocupantes del camión se dieron a la fuga.

El adolescente de 14 años, que formaba parte del grupo, se apoderó del automóvil de la víctima, pero lo abandonó más tarde en la intersección de las avenidas Galvarino y Bulnes, donde fue detenido.

El fiscal Andrés Barahona indicó que, aunque inicialmente se consideró un posible intento de homicidio o un robo violento, el conflicto surgió por motivos familiares.

La Sección de Investigación Policial (SIP) logró obtener imágenes de cámaras de seguridad que revelaron que se trató de un conflicto relacionado con la custodia de los menores en el vehículo. Barahona detalló que, durante la confrontación, se disparó hacia los pies de uno de los involucrados, lo que llevó a que la víctima fuera trasladada al hospital con una herida en la pierna.

La investigación se centra ahora en identificar al autor de los disparos. En cuanto al menor detenido, se le formalizó por daños, lesiones y un intento de hurto del vehículo, que fue recuperado en las cercanías.

El fiscal Barahona aclaró que no se trata de un caso de sicariato ni de enfrentamientos entre bandas criminales. Además, solicitó al tribunal un plazo de seis meses para continuar la investigación, ya que hay otros implicados que podrían ser formalizados y la calificación del hecho podría cambiar. El menor quedó bajo la supervisión del Servicio de Mejor Niñez y con la prohibición de acercarse a la víctima.