En febrero de este año, se conoció el caso de un hombre que le causó la muerte a Álvaro Hidalgo Cáceres luego de pegarle con su cabeza en la cara. Lo anterior, le provocó un traumatismo encéfalo craneano, por lo que fue formalizado por el delito de homicidio, no obstante, éste quedó con arresto domiciliario nocturno.
Los hechos ocurrieron en el night club Géminis. Allí, alrededor de las 3:45 de la madrugada, el imputado le pidió al joven que le comprara un trago. Tras la negativa de su respuesta, este procedió a golpearlo con su cabeza en la cara, lo que provocó que Álvaro se pegara fuertemente con una pared que estaba atrás. Seguido de aquello, el joven cayó al piso y quedó inconsciente varios minutos.
La fiscal, Nataly Muñoz, agregó que tras el episodio que ocurrió “sin motivo alguno y con la intención de matar, el afectado se retiró a su domicilio ubicado en calle Orella, siendo encontrado muerto alrededor de las 13:00 horas, ello a causa de un traumatismo encéfalo craneano complicado secundario, compatible con una caída a nivel provocada por la acción desplegada por el imputado”.
Lo anterior, hizo que la Fiscalía solicitara la medida cautelar de prisión preventiva, pero fue rechazada por el juez, Vicente Muratori, quien argumentó que “no existe ningún antecedente concreto que permita llegar a la conclusión de un dolo, no hay manipulación de armas, no hay una golpiza dada con el objeto de quitarle la vida. Es evidente que hay un riesgo al golpear la cabeza de otro ser humano, sin embargo, no es simple y común que por un cabezazo una persona pierda la vida como ocurrió”, explicó.
